En este verano vuelve la tendencia de las sandalias altas romanas al estilo del joven diseñador de moda Alexander Wang, por eso, hoy te porpongo un DIY para hacerlas tú misma con un par de sandalias viejas y casi sin gastar! El resultado queda así de bien ¿Te animas?
Estas sandalias de gladiador son elegantes, cómodas e, indudablemente, atractivas, pero la mayoría no estamos dispuestas a pagar el precio que alcanzan en el mercado y rondar entre los 40 euros (en adelante). Siempre con el espíritu del DIY presente, te invitamos a que consigas en media hora una réplica casera de aspecto muy parecido y fácil de confeccionar. Además, ¡serán mucho más baratas!
Materiales que vas a necesitar:
- Unas sandalias sencillas que sirvan de base y que puedes comprar en cualquier tienda o mercadillo, o reciclar unas que ya tengas.
- Aproximadamente 1 metro de cuero (o imitación). Procura que la anchura de sus correas coincida con la de tus sandalias. Calculo un metro porque la tira más larga irá desde la punta de nuestro pie a la rodilla como máximo.
- Pegamento resistente.
- Tijeras.
- 6 botones a presión.
- Algo rígido que sirva como eje para la altura (Esto es opcional. Puede utilizarse una tira de PVC o alambre).
- Herramienta para perforar o punzón.
1. Decide la cantidad de tiras que llevarás alrededor de las piernas (es recomendable no más de tres). Mide, también, la pantorrilla allí donde vayas a colocarlas para que no se te caiga una vez hecha.
2. Corta de dos en dos el cuero y comprueba que las medidas sean diferentes dependiendo del grosor de tu pierna. Igualmente, debes cortar otra pareja de tiras que formen la altura de la sandalia.
3. Pega esa tira larga en la unión cercana a los dedos de tu sandalia. Procura utilizar un pegamento resistente para que el calor o el roce no lo despeguen.
4. Si decides incorporar una tira rígida, este es el momento de colocarla sobre dicha correa larga (siempre en la parte posterior, para que no se vea). De este modo, proporcionarás una estética diferente y moderna.
5. Pega, horizontalmente, el resto de las tiras.
6. Al menos, durante una noche, deja que se sequen.
7. Por último, añade los botones midiendo con exactitud el lugar donde colocarlos —por detrás—. Para ello, ayúdate de la perforadora o punzón. En cada tira deberás hacer dos agujeros (uno en cada extremo) para que los botones a presión encajen.
Y ¡así de fácil! Ya puedes presumir con tus nuevas sandalias de gladiador por menos de 10 euros!